Todas las noches me duermo con un objetivo, con el mismo que despierto todas las mañanas. Siempre digo, voy a despertar y le voy a brindar la mejor sonrisa a mi familia y hoy no voy a ser un problema para ellos. Me levanto, voy al baño a sacarme la cara de sueño junto a todas esas lagañitas insoportables y cuando al fin logro abrir mis ojos me encamino hacia el comedor. Allá me están esperando, por lo menos mamá esta despierta con su mejor buena onda y ganas de tener un excelente día, pero siempre encuentro a pesar de todo, ese mínimo detalle, esa insignificante razón que me come la cabeza y hace que me ponga de muy mal humor. Aunque siempre tengo el propósito de no hacerle caso a esas cosas, de no enojarme por nada y de tener un día fantástico. Ya está en mi por naturaleza la sensibilidad y falta de paciencia, no soy para nada serena y es difícil llegar a un acuerdo en una familia donde siempre el ánimo esta por arriba de las nubes.
Es complicado analizarse uno mismo y llegar a la conclusión de que por algo sos una ovejita diferente. Me mato pensando en "de donde mierda salio todo esto, de donde mierda salí yo, de donde mierda aprendí que con mi mal humor y enojos voy a conseguir lo que quiero". Y por un lado capaz un poquito hay de mi papá, pero ...ah mierda! me perfeccioné como las mejores, tengo un humor inmanejable.
Lo peor es que yo debería poder cambiar eso, pero es como que no va conmigo la capacidad de matarme intentando. Soy desastrosamente perezosa y me da "paja" en términos adolescentes tener que esforzarme para no gritarle a todos cuando algo me molesta.
Por un lado, yo veo con humor todo y es muy obvio que las peleas diarias me acercan más a mi familia. Que mejor hermano que con el que se puede pelear, o que mejor madre que la que se pasa el día retándome. Es sabido que unos años y no muchos, nos vamos a sentar en una mesa a comer un buen asado teniendo cada uno nuestra familia y vamos a tener guardados como momentos dorados todos esos almuerzos en los que mi mal humor y el odio hacia la forma chancha de comer de mis hermanos le ponían onda a la comida.
Así que yo soy loca, yo soy sensible, soy malhumorada, soy aburrida, complicada. Tengo una tonelada de cosas de mina histérica en mi cabecita dando vueltas. Y es gracioso, me gusta la psicología y analizándome llegué a la conclusión de que soy normal dentro de todo. El mal humor es normal, y lo más normal es que si sos una persona un poquito complicada dios seguro te manda al mundo a convivir con personas que van a saber aprovecharlo y divertirse con tus enojos.
Nada termina con mi mal humor, nada termina con la diversión y el vicio de molestar de mis hermanos, las personalidades no cambian, y las relaciones tampoco terminan por pelotudeces, solamente todo se va adaptando. Esta nota si termina y con una expresión que me está matando
"que hijo de puta diosito, vos sí que sabés como combinar a las personas!"
No hay comentarios:
Publicar un comentario
~ Opiñones Flasheras ~